FAQ

• Estrés y trastornos psicosomáticos relacionados con el confinamiento covid de 2020 (Italia)
• Niños/jóvenes con necesidades educativas especiales (Italia y Rumanía)
• Niños/jóvenes con necesidades mentales especiales (China y Colombia)
• Niños/jóvenes con necesidades físicas especiales (Colombia)
• Niños/jóvenes con enfermedades crónicas y largos períodos de hospitalización (Colombia)
• Niños/jóvenes con enfermedades terminales (Colombia)
• Niños/jóvenes desatendidos, abandonados, expuestos a la pobreza o violencia doméstica (ver la sección "contactos")
• Niños/jóvenes adoptados (Colombia y Argentina)
• Niños/jóvenes en orfanatos (Palestina, Rumania, China)
• Niños/jóvenes que viven en barrios con un alto grado de delincuencia, incluida la infantil (Sudáfrica, Colombia, Argentina)
• Niños/jóvenes que sufren traumas colectivos debido a guerras (Palestina, Colombia, Malasia) o migración forzada (Alemania)
• Niños/jóvenes que presenciaron la muerte de sus seres queridos debido a desastres naturales (terremotos en China, 2008; Tibet, 2009; Italia, 2011)
• Niños/jóvenes (anteriormente) expuestos a la prostitución (Colombia y Malasia)

Para convertirse en acompañante (o “tutor del trabajo de un niño”), es necesario pasar una entrevista de admisión y posteriormente participar como voluntario en un proyecto TEA de tres meses, realizado por al menos dos Formadores-IAES certificados. El proyecto consta de:

• 1 curso introductorio teórico-vivencial de 25 horas
• 12 sesiones semanales con niños
• 1 ciclo de reuniones de intervención y supervisión para monitorear el avance del curso
• la redacción de un informe final sobre el proceso hecho con el niño asignado y con el grupo

El curso introductorio incluye:

• una introducción teórica: alusiones históricas y una introducción metodológica
• diferentes experiencias con arena en ambos roles (como acompañante y como usuario)
• la preparación de aspectos prácticos y organizativos

La prioridad es formar voluntarios in situ que puedan seguir llevando a cabo proyectos donde más se necesiten. En cualquier caso, el curso puede ser reconocido como pasantías.

Generalmente, las formaciones se llevan a cabo en proyectos en curso (Homepage), pero también es posible organizar una formación invitando a dos formadores IAES si hay un grupo de al menos 12 voluntarios interesados.

No existen requisitos formales, pero la experiencia demuestra que los siguientes factores favorecen significativamente la realización de un proyecto:

• la colaboración con una asociación del campo social
• un grupo de 12-16 voluntarios a quienes les gusta capacitarse e involucrarse
• un espacio protegido y limpio, con un aula apta para albergar al menos seis areneros y las miniaturas, donde también pueden llevarse a cabo las sesiones de formación e intervención/supervisión del grupo.

La IAES proporciona al menos dos formadores certificados que capacitan a los voluntarios y les brindan todo el material didáctico y organizativo, y el acompañamiento para la implementación armónica del proyecto. La IAES está interesada en realizar formaciones en las localidades donde se puedan realizar proyectos con cierta continuidad.

La primera implementación de un proyecto en TEA requiere un promedio de 135 horas de trabajo por parte de 2 formadores IAES. Se dividen de la siguiente manera:

• 50 horas de preparación/organización inicial: la selección de voluntarios a través de entrevistas, la traducción de manuales y todos los documentos al idioma local, la compra de materiales que se podrán reutilizar durante décadas y la organización espacio-temporal del proyecto.
• 25 horas para la formación teórico-vivencial de 12-16 voluntarios por al menos 2 formadores IAES (en algunos casos se puede solicitar el reembolso de los gastos de viaje, comida y alojamiento).
• 60 horas de acompañamiento del proyecto (supervisión, intervención) por parte de los formadores durante 4 meses, incluida la revisión del informe final y, en caso de un resultado positivo, la certificación como acompañantes IAES.

El presupuesto para la implementación de un primer proyecto y la formación y eventual certificación de 12-16 voluntarios asciende por tanto a 4.000-6.000 € (dependiendo del coste del material y del número de formadores: generalmente 2 formadores pueden formar de 12 a 16 voluntarios por ciclo).

Generalmente de los 5 a los 15 años.

Generalmente maestros, educadores o trabajadores sociales, pero también pueden ser los propios padres quienes propongan a sus hijos.

Cualquier niño, incluso con una discapacidad física o mental (siempre que no le impida jugar en el arenero) es bienvenido. Adaptando la disposición del material a las necesidades específicas, por ejemplo, se llevaron a cabo proyectos con niños con discapacidad visual.

El voluntario no tiene formación psicológica o sobre los símbolos. "Se le enseña a estar presente con empatía, observando al niño mientras elabora su caja de arena y juega. También tendrá que tomar nota de lo que le pasa internamente. Se trata de emociones fuertes: tristeza, miedo, distracción, cansancio. Es decir, todas percepciones físicas que el voluntario no siempre conecta con el juego. Nosotros -especifica Pattis Zoja- le enseñamos a asumir estas emociones sin tener que entenderlas siempre. Hay grupos de apoyo, pero no los definimos como supervisión”. El voluntario "escucha, acepta, acoge. Ésta es su tarea. Entienden más por las emociones que por la cognición".

Un niño lleno de miedos y traumas puede permanecer en el grupo en la primera sesión y no hacer nada. Un niño inhibido solo puede mirar y tomarse su tiempo para participar. El grupo se convierte para él en un lugar seguro, elemento fundamental para la terapia del trauma.